A Knight in the Attic, análisis de un juego entrañable.
Hoy os traemos un análisis de un juego que guarda mucho potencial en su simplicidad, un juego de marionetas, pequeños personajes, como juguetes de niños, con un encanto desbordante y una historia bonita, si lográis descifrarla, ya que viene en completo inglés, sin opción al castellano.
Historia en A Knight in the Attic
Pues como buenos niños que somos, impertinentes y con ganas de husmear en todos los rincones, llegamos al misterioso desván de nuestra abuela, donde encontramos unas cajas de lo más peculiares.
Investigamos y encontramos una serie de objetos, los cuales nos contarán una magnífica historia de aventuras, aventuras de caballeros y princesas, y como no, de la oscuridad.
Ni corto ni perezosos nos disponemos a jugar con las figuritas que encontramos y somos testigos de las aventuras de Ginebra, la princesa de un pueblo el cual es acechado por la oscuridad. Debemos de tener la mente fría, y saber desenvolvernos por los laberintos que nos aguardan en los bosques del reino, todo ello para poder salvarlo y encontrar a los héroes de la historia.
El juego nos cuenta una historia diferente de los Caballeros de la mesa Redonda, original y adaptada perfectamente a la realidad virtual.
Gráficos y banda sonora
Hemos jugado a la versión de PCVR y el juego se ve maravillosamente bonito, si bien no esperéis grandes gráficos y entornos realistas.
Nos encontramos en el altillo de casa de la abuela y poco se puede ver, aparte de los cuatro objetos que tenemos a nuestro lado.
Eso sí, el tablero con el mini mapa donde manejamos a nuestra heroína es muy gracioso y resulta muy gratificante jugarlo en VR.
La
banda sonora es aceptable, acompaña bien al juego aunque es algo escasa. Ayuda en la inmersión y es la típica música que se puede esperar en un juego de esta categoría.
Dificultad y comodidad
Llegamos al punto determinante de este juego, las mecánicas de movimiento. Y es que el juego es original en ello y no esperemos movernos por el mapa como si de un Zelda se tratase, ni mucho menos.
Nuestro personaje es un muñequito que en lugar de piernas tiene una pequeña esfera con la que rodar. Es el típico movimiento de aquellos tableros de habilidad en los que tenemos que mover el tablero en sí para que la bola no caiga por los agujeros. Esto hace del juego un punto original único por el momento en VR.
Si bien al principio nos hacen mover a nuestro personaje con la ayuda de las dos manos, o sea, moviendo el tablero, en el segundo nivel, nos dan la opción de usar los sticks de los mandos, lo que lo hace más amenos y menos engorroso.
Es un toque original que hace que los paseos por lugares estrechos y peligroso nos suban la tensión haciendo un uso excepcional de las físicas.
Es difícil, sobre todo cuando llevamos unos cuantos niveles superados, pero es divertido y no se nos ha hecho desesperante en ningún momento. Aquí le damos un diez por la originalidad y lo bien ejecutada que está.
Conclusión
A Knight in the Attic es un juego muy divertido y original, han querido darle una vuelta de tuerca tanto a la historia como a las mecánicas y lo han conseguido.
Es un juego bonito de ver y de jugar, una historia para todos los públicos y que hace un uso más que correcto de las posibilidades de la realidad virtual.
Nos siguen sorprendiendo estos juegos en tercera persona en VR, lo que antes no hubiéramos pensado nunca, pero es que se adaptan perfectamente.
Un juego más que notable, y más cuando vemos su precio, el juego está disponible en Steam por 9.75€, un regalo para nuestros visores y para nosotros.
Si os gustan los mundos mágicos, las aventuras de la edad media y los puzles en los que deberemos de usar, incluso objetos de nuestro alrededor, este es vuestro juego.
Algo corto, pero muy amenos y divertido.
Recomendado en Generación XR.
A Knight in the Attic
PROS
- Mecánicas originales
- Bonita historia
- Un juego diferente y divertido
CONS
- Íntegramente en inglés, ¿En serio?
- Algo corto, se completa en apenas tres horas
- Los últimos niveles son muy difíciles