Un viaje brutal por la frontera americana donde tu única compañía será tu autocaravana (y quizás tres colegas igual de insensatos que tú)
El mundo está lleno de simuladores de supervivencia donde los zombis, los monstruos o alguna entidad sobrenatural quieren tu pellejo. Long Drive North decide tomar otro camino: aquí lo que amenaza tu vida no son las criaturas, sino la implacable naturaleza estadounidense, tu autocaravana destartalada y tus propios colegas si decides jugar en cooperativo. El juego se lanzará en acceso anticipado en Steam este mes de noviembre, y promete un viaje tan desesperado como inolvidable.
La propuesta es clara: conducir, reparar, cazar, cocinar y sobrevivir en un entorno hostil que no da segundas oportunidades. No hay apocalipsis con zombis, no hay aliens escondidos detrás de los árboles, solo tú contra un mundo abierto gigantesco que pondrá a prueba tu ingenio y tu paciencia. Y sí, un tráiler recién publicado ya nos da un adelanto de lo que significa embarcarse en este viaje con hasta cuatro jugadores: amistades forjadas en carretera que probablemente acaben reventadas contra la cuneta.
Tu autocaravana es tu templo… y tu mayor problema
En Long Drive North no eres un héroe de acción ni un cazador de mutantes, eres alguien que intenta mantener en pie (literalmente) una vieja autocaravana. El vehículo es tu refugio, tu salvación y tu punto débil. Tendrás que repostar combustible, cambiar piezas, meterte bajo el capó y rezar para que el motor no explote justo cuando la tormenta se acerca.
La mecánica principal no es solo conducir, sino también mantener en buen estado ese RV que parece sobrevivir de milagro. Cada rueda que cambias, cada pieza que recuperas de un coche abandonado, cada reparación improvisada te acerca un poco más a seguir avanzando hacia el norte. La frontera no se conquista a base de balas, sino de tu capacidad de mancharte las manos de grasa.
Sobrevivir no es un paseo en carretera
No basta con poner gasolina y arrancar. Long Drive North introduce gestión de hambre, sed y sueño. Vas a tener que cazar, cocinar y aprovechar recetas para no acabar tirado al borde de la carretera con el estómago vacío. También tendrás un compañero canino que hará que la soledad pese un poco menos… aunque el perro no va a cazar ni cocinar por ti, no te hagas ilusiones.
La exploración es clave: coches abandonados, edificios en ruinas, recursos escasos y peligros ambientales. Aquí el verdadero monstruo es una tormenta recurrente que amenaza con acabar tu viaje en cualquier momento. Mantente despierto, mantente alerta y mantente vivo: no hay margen para errores.
Multijugador: porque sufrir en grupo siempre es más divertido
¿Viajar solo? Posible. ¿Más recomendable? Depende de lo mucho que confíes en tu paciencia. El modo cooperativo de hasta cuatro jugadores añade esa salsa que convierte un simulador de supervivencia en una prueba de amistad. Reparar juntos la autocaravana, cocinar con lo poco que encuentras o discutir sobre quién olvidó repostar antes de entrar en medio del desierto: eso sí que es auténtica tensión dramática.
Las mecánicas multijugador permiten que cada jugador asuma un rol: uno conduce, otro arregla, otro se va de caza y el último… probablemente se quede dormido al volante. Así es la vida en carretera, un caos organizado donde la improvisación es la norma.
Inspiraciones claras, identidad propia
Los creadores de Long Drive North no ocultan sus influencias: películas de supervivencia americana y juegos como The Long Dark, The Long Drive y My Summer Car. Pero lejos de quedarse en un pastiche, el título apuesta por una experiencia sandbox abierta, donde cada decisión cuenta y donde lo cotidiano —cocinar, repostar, reparar— se convierte en auténtica supervivencia.
La clave es que no intenta engañar a nadie con promesas de mundos fantásticos o enemigos imposibles. Aquí el enemigo eres tú mismo, tu autocaravana y la naturaleza. Y con esa honestidad brutal, logra diferenciarse de un género saturado.
Rumbo al acceso anticipado
Long Drive North se estrenará en Steam este noviembre en acceso anticipado. La invitación es clara: añade el juego a tu lista de deseos si quieres recibir la notificación en cuanto arranque el viaje. Porque este no es un paseo cómodo por la Ruta 66, es un test de supervivencia donde cada kilómetro se gana a pulso.
Prepárate para conducir, reparar, cazar y sobrevivir en una experiencia que promete romper tus nervios… o tu amistad con ese colega que siempre olvida reponer munición. El norte te espera, y el viaje será tan largo como implacable.