Chucklefish y Cute Newt presentan una aventura pixelada con caos garantizado
Si pensabas que ya habías visto todas las combinaciones posibles en el mundo del indie, llega Wildekin para recordarte que siempre se puede liar un poco más. Anunciado en el Xbox @ Gamescom Showcase, este título de Chucklefish y desarrollado por el pequeño pero peleón estudio Cute Newt (sí, tres personas con más energía que un servidor entero de Minecraft), propone una mezcla entre supervivencia, pixel art en 3D y multijugador cooperativo que huele a desastre divertido desde el minuto uno. Llegará a Xbox One, Series S|X y PC, con una fecha marcada en el calendario para 2026.
La idea es sencilla de explicar, pero no tanto de ejecutar: caes del cielo sin nada más que tus puños, tu ingenio y, aparentemente, una obsesión por redecorar aldeas. Desde ahí, hasta cuatro jugadores podrán unirse para explorar un mundo lleno de criaturas perdidas, monstruos extraños y festivales de temporada que parecen sacados de una versión caótica de Stardew Valley. El resultado promete ser tan encantador como caótico… y seguramente más caótico que encantador.
Una jungla de supervivencia con sabor a pixel art
Lo primero que sorprende de Wildekin es su estilo visual: un pixel art en 3D vibrante y lleno de detalles que parece a la vez retro y moderno. No hablamos de los típicos cuadraditos planos, sino de un mundo lleno de vida donde cada festival, monstruo y personaje animal tiene su propia personalidad marcada. Y cuando decimos personalidad, hablamos de rarezas: desde criaturas que parecen diseñadas tras una maratón de café hasta aldeanos que podrían rivalizar en excentricidad con los vecinos de Animal Crossing.
La exploración no será solo un paseo bucólico, porque entre rescatar a los Wildekin perdidos y sobrevivir en un entorno hostil, habrá que pegarse con enemigos, recolectar recursos y levantar una ciudad desde cero. Y ya sabemos lo que pasa en los juegos cooperativos: uno quiere construir la herrería, otro se dedica a poner flores en todas partes y al final alguien termina persiguiendo un conejo en lugar de luchar contra el monstruo gigante.

Construye, sobrevive y… decora hasta que te echen
El verdadero corazón del juego está en su sistema de construcción y gestión. Wildekin no se limita a ponerte a cortar árboles como si fueras un leñador digital, sino que te invita a crear una comunidad completa. Habrá que levantar casas, asignar trabajos, fabricar equipo y hasta decorar tu rincón con un gusto dudoso que seguramente hará llorar a más de un diseñador de interiores. Todo ello mientras sobrevives a criaturas que parecen salidas de un zoológico con esteroides.
Y como buen simulador social, no faltarán festivales de temporada, concursos y encargos varios. Porque claro, no basta con salvar a los pobres Wildekin, también hay que entretenerlos y hacer que tu aldea sea “instagrameable” en formato pixelado.

El debut de Cute Newt, con el respaldo de Chucklefish
Detrás del proyecto está George Wyman, exartista principal de Starbound, que en 2017 fundó Cute Newt junto a otros dos locos con la misma pasión. Tres personas que, aparentemente, no conocen la palabra “pequeño” cuando se trata de proyectos. Para un equipo tan reducido, lanzarse con un multijugador online de mundo abierto es básicamente como intentar mudarse solo cargando un sofá de tres plazas… pero si alguien puede lograrlo, es esta gente.
El respaldo de Chucklefish asegura que el juego no solo llegará a buen puerto, sino que lo hará con toda la experiencia de quienes han publicado joyas como Stardew Valley, Eastward o Risk of Rain. Vamos, que saben cómo convertir una idea loca en un éxito viral.

El caos más encantador que llegará en 2026
En definitiva, Wildekin pinta como esa mezcla rara que solo podía salir del terreno indie: supervivencia, construcción, exploración y animales con más carisma que algunos influencers humanos. Una aventura pensada para compartir con amigos, aunque lo más probable es que acabéis discutiendo porque uno construyó la taberna en medio del huerto.
Cuando se lance en 2026, lo sabremos con certeza: ¿será Wildekin un nuevo clásico cooperativo o simplemente el juego que arruinó amistades a base de conejos pixelados?