Caminar libremente en VR con solo 2 metros cuadrados de espacio ya no es un sueño… son unas zapatillas robotizadas
Dar pasos reales en VR sin chocarte con la lámpara del salón o acabar abrazando la cortina del comedor está más cerca de convertirse en una experiencia cotidiana. La empresa Freeaim, con sede en Reino Unido, ha triunfado en su campaña de Kickstarter para lanzar sus revolucionarias VR Shoes: un sistema de locomoción física motorizada que permite caminar, correr y girar en cualquier dirección sin moverte del centro del juego. Y sin necesidad de plataformas gigantes ni arneses anticaída.
El invento ha recaudado más de 176 000 libras en menos de una semana, superando con creces su meta inicial de 149 000. Si todo va según lo previsto, estas botas rodantes futuristas llegarán a los primeros usuarios en 2026. La promesa es clara: que puedas andar por mundos virtuales sin cables, sin límites… y sin que tu salón parezca un laboratorio de biomecánica de los 90.
Así funcionan las zapatillas motorizadas que mantienen tu cuerpo en el sitio
La magia de las Freeaim VR Shoes está en su sistema de motores omnidireccionales que detectan tu movimiento e invierten la fuerza para mantenerte en el mismo punto. Es como tener una cinta de correr pegada a cada pie, pero con mucha más precisión y sin esa sensación de “flotar sobre hielo” de otras soluciones anteriores.
Cada zapatilla compensa tu paso de forma automática, permitiéndote caminar libremente en todas las direcciones con naturalidad. No hace falta empujar con fuerza ni adaptarse a una superficie rara: simplemente caminas como siempre… y el sistema hace el resto. En lugar de moverte tú, las suelas ruedan bajo tus pies para mantenerte en el centro, creando la ilusión perfecta de locomoción real en entornos virtuales.
¿Lo mejor? No necesitas estructuras metálicas alrededor ni correas al torso. Aunque ofrecen una especie de marco estabilizador como opción para los primerizos, el producto ha sido diseñado para funcionar sin ataduras ni apoyos, dando total libertad de movimiento.

Dos modelos, un objetivo: que moverse en VR no sea solo para los millonarios
Freeaim ha presentado dos versiones de sus zapatillas:
- VR Shoes Light, una edición más asequible, pensada para el público general, con funciones limitadas y sin rotación automática.
- VR Shoes Advanced, con auto-rotación integrada y pensada para entornos más exigentes o usuarios avanzados.
El precio para los mecenas del Kickstarter ronda los 799 a 1049 euros, dependiendo del modelo. La versión empresarial ya existe desde hace tiempo con un precio mucho más elevado (alrededor de 4000 euros), pero esta campaña marca el salto definitivo hacia el mercado de consumo doméstico, con una estimación de entrega para 2026.
Compatible con juegos reales: locomoción física en VRChat, Doom 3 y más
Las Freeaim VR Shoes son compatibles con SteamVR y con algunos juegos en Meta Quest, siempre que usen locomoción libre. Según sus creadores, ya han sido probadas con títulos como VRChat, Until You Fall, The Walking Dead: Saints & Sinners y hasta mods de Doom 3. La clave está en que el sistema simula el desplazamiento del joystick, por lo que cualquier juego que use movimiento analógico es candidato para este nuevo nivel de inmersión.
Además, la superficie mínima recomendada es de apenas 2 metros de diámetro, por lo que incluso quienes juegan en espacios pequeños podrían beneficiarse de este sistema. Y gracias a su algoritmo de freno inteligente, se evitan los sobresaltos o movimientos bruscos que puedan provocar mareo.

El futuro se pisa fuerte… si puedes pagarlo
Aunque el precio sigue siendo elevado, la recepción de la comunidad ha sido muy positiva. Muchos usuarios en foros como Reddit han calificado el invento como la solución más convincente hasta la fecha para la locomoción en VR. Otros, claro, siguen señalando que su adopción masiva dependerá de que bajen los precios y se mejore la compatibilidad total con Quest sin depender de PC.
Lo que está claro es que el concepto ya no es una demo futurista en una feria de Las Vegas. Las Freeaim VR Shoes existen, funcionan, y tienen una comunidad detrás con ganas de patear mundos virtuales como si fueran pasillos de su casa.