Tras cuatro años de desarrollo en solitario, el malasio Mas lanza el 7 de agosto en Steam un RPG dibujado a mano que mezcla combates por turnos relajados, diálogos absurdos y casas decoradas con croquetas
En el mundo de los videojuegos donde los mundos postapocalípticos suelen estar dominados por la desesperanza, los disparos o los mutantes sin camiseta, llega Artis Impact con una propuesta radicalmente distinta: un RPG donde el fin del mundo se lleva con humor, calidez y muchas ganas de decorar tu casa con estilo. El título, desarrollado en solitario por el malasio Mas, verá la luz el próximo 7 de agosto en Steam, y promete ser una experiencia tan acogedora como profundamente nostálgica.
Creado con RPG Maker MV, cada píxel de Artis Impact ha sido cuidadosamente dibujado a mano por una sola persona. No hay equipos de producción de veinte personas detrás de cada mapa: hay paciencia, pasión y un estilo visual que rezuma personalidad. El resultado es un juego que parece salido de otra época, pero que se siente sorprendentemente actual, con un enfoque narrativo que te hace reír, pensar… y luego te da permiso para echarte una siesta.
Un mundo pixelado que rebosa vida, sarcasmo y patatas
En Artis Impact tomamos el control de Akane, una superviviente humana que recorre las ruinas de una civilización compartida ahora con inteligencias artificiales y otros personajes igual de peculiares. A su lado, su inseparable compañero Bot, una IA con lengua afilada y más comentarios sarcásticos que protocolos de combate.
La exploración te lleva por ciudades dibujadas a mano, llenas de detalles encantadores, desde tiendas de ramen hasta balnearios decadentes. Y aunque el mundo se haya ido al traste, aquí se respira una especie de melancolía amable. No es el típico “todo está perdido”, sino más bien un “todo se fue al cuerno, pero aún podemos echarnos unas risas”.

Combates por turnos que no te hacen odiar los turnos
El sistema de combate es exactamente lo que muchos fans de los RPG clásicos piden a gritos: ágil, directo y divertido. Nada de menús eternos o curvas de dificultad imposibles. Aquí se premia la estrategia sencilla y la fluidez: subes de nivel, mejoras tu equipo, eliges bien tus habilidades y listo. Y por si fuera poco, los enemigos son tan excéntricos como el resto del juego: olvida los goblins genéricos, aquí te enfrentas a criaturas que parecen salidas de una mezcla entre un taller de collage y un mal sueño simpático.
En resumen, un combate pensado para entretener, no para frustrar. Ideal para quienes aman los turnos, pero ya no tienen tiempo (ni ganas) de hacer cálculos como si estuvieran preparando la declaración de la renta.

Diálogos absurdos, misiones entrañables y un corazón pixelado que late con fuerza
La narrativa de Artis Impact tiene ese difícil equilibrio que pocos logran: es graciosa sin caer en lo tonto, emotiva sin ser cursi. Los diálogos con PNJ están llenos de humor, ironía y más de una frase que dan ganas de enmarcar. Las misiones secundarias, lejos de ser simple relleno, ofrecen pequeñas historias que conectan con el jugador a través de la humanidad más básica: una pérdida, una reconciliación, una sopa que no sale bien.
Además, el juego apuesta por incluir momentos de pura cotidianeidad: puedes decorar tu casa, trabajar a medio tiempo, darte un baño relajante o cocinar sin riesgo de morir envenenado. Es un RPG que entiende que, a veces, lo más épico que puedes hacer es cuidarte.

Un homenaje sincero a los RPG clásicos, sin nostalgia tóxica
Artis Impact no pretende reinventar el género, sino recordarnos por qué nos enamoramos de él. El arte hecho a mano, el sistema de turnos, la progresión clara, los personajes memorables… todo está ahí. Pero con una sensibilidad moderna, sin necesidad de gritar «¡mira cómo se hacía antes!». Mas, su creador, ha invertido cuatro años de su vida en este proyecto, y eso se nota. Cada esquina del juego respira cariño, dedicación y una visión muy personal.
Y eso, en tiempos de producción masiva y clones sin alma, es oro puro.
Artis Impact se lanza el 7 de agosto de 2025 en Steam. Ya puedes probar la demo gratuita y añadirlo a tu lista de deseos para no perderte esta joya indie que viene a demostrarnos que el apocalipsis también puede ser reconfortante, acogedor y… delicioso si viene con croquetas de patata.