Las Ray-Ban quedan atrás: llegan las Oakley con cerebro digital, captura en HD y batería para rato
¿Quién dijo que la inteligencia artificial no podía ir a juego con tu outfit? Meta vuelve a la carga con su siguiente apuesta en el terreno de las gafas inteligentes, esta vez aliándose con la mítica marca Oakley para lanzar un modelo que promete mejorar en todo lo que las Ray-Ban Meta ya ofrecían: más batería, mejor cámara, y un diseño que grita «me subí al futuro en patinete eléctrico».
Presentadas en el marco del evento Cannes Lions 2025, estas nuevas gafas se posicionan como el paso lógico (y comercialmente agresivo) para Meta en su afán por vestirnos con tecnología sin que parezca que vamos camino de un congreso de ingenieros.
Grabación mejorada, batería extendida y 400 razones para mirarlas dos veces
El nuevo modelo integra una cámara de 12 megapíxeles, capaz de grabar vídeo en resolución 1080p y hasta 60 segundos de duración, además de tomar fotos con una calidad bastante por encima de lo que ofrecían las gafas anteriores. Todo esto sin tener que renunciar a un diseño deportivo y discreto marca de la casa Oakley, lo que seguramente atraerá a un público que se había quedado fuera con las Ray-Ban más tradicionales.
Además, uno de los puntos más destacables es la mejora sustancial en la autonomía. Se habla de una duración de batería de hasta 36 horas en espera y un uso activo mucho más eficiente, que permite grabar vídeos, usar el asistente de voz y hacer streaming sin preocuparse por quedarse tirado a mitad del paseo.
¿Precio? 400 dólares. ¿Disponible? Más pronto de lo que crees, aunque en Europa todavía no se ha confirmado fecha exacta. Pero ya sabes cómo va esto: si hay gafas nuevas, acabaremos viéndolas en los escaparates antes de que puedas decir “siri, graba eso”.

Inteligencia artificial que escucha, responde… y te hace parecer menos raro
Como no podía ser de otra forma, las gafas siguen integrando el sistema de IA desarrollado por Meta, capaz de responder a comandos de voz, identificar objetos, leer texto en tiempo real y ayudarte con tareas cotidianas. Vamos, que ahora puedes preguntarle a tus gafas si ese edificio de enfrente es una pizzería o la sede del banco… y te responderán sin juzgarte.
¿Útil? Bastante. ¿Un poco inquietante? También. Pero eso forma parte del encanto de vivir en 2025: aceptar que tu montura puede tener más memoria que tú.
¿Una amenaza para la privacidad o el siguiente paso lógico?
Las gafas inteligentes siguen en ese punto dulce entre la fascinación y la desconfianza. Las nuevas Oakley x Meta suben la apuesta con una cámara más capaz y una IA más presente, lo que inevitablemente reabre el debate sobre privacidad, usos sociales y cuántas personas te mirarán raro cuando hables solo por la calle.
Pero siendo realistas, esto ya no es ciencia ficción: es la dirección clara en la que las grandes tecnológicas están empujando. Meta quiere posicionarse como referente en el wearable inteligente cotidiano, y estas gafas pueden ser la clave para dar ese salto desde lo geek a lo mainstream.

¿Moda, gadget o futuro inevitable?
Sea como sea, las nuevas gafas Oakley firmadas por Meta no son solo un capricho tecnológico: son una declaración de intenciones. Un paso más hacia ese mundo donde lo digital no está en tu bolsillo… sino en tu cara. Y con un poco de suerte, no tan mal combinado como cabría esperar.