En un mundo donde casi todo está hecho con papel —menos las facturas de luz, que siguen llegando en PDF—, Hirogami propone algo especial: una experiencia que no solo entra por los ojos, sino que se despliega (literalmente) ante tus sentidos. Porque sí, este nuevo título desarrollado por Bandai Namco Studios Singapore y GYAAR Studio, y publicado por Kakehashi Games, viene cargado de sensibilidad oriental, poderes transformistas y plataformas con aroma a té matcha.
El juego llegará el próximo 3 de septiembre de 2025 a PlayStation 5 y Steam, y lo hace con una propuesta tan visual como mecánicamente original. En Hirogami encarnamos a Hiro, un maestro del abanico y del arte del plegado, cuya misión es proteger su hogar de una amenaza digital que amenaza con deshacer su frágil mundo de papel. Literalmente: aquí todo se arruga, se desgarra o se vuela si sopla el viento. Y tú tendrás que evitarlo.
Una oda visual al arte del origami
Uno de los grandes reclamos de Hirogami es su ambientación: un universo construido a base de papiroflexia, donde cada montaña, cada criatura y cada edificio parecen sacados de una delicada exposición de arte japonés. Pero no te dejes engañar por lo bonito: bajo esa apariencia frágil se esconde un mundo complejo, lleno de secretos, caminos alternativos y desafíos de precisión.
El diseño artístico no solo es bello, también está al servicio de la mecánica. Las hojas de papel se doblan para formar puentes, plataformas o trampas. Hay caminos que solo se abren si dominas el arte del plegado, y momentos en los que la destrucción del entorno cobra un papel clave. El juego no solo se ve bonito, se juega bonito.
Poderes animales y transformaciones que doblan las reglas
A lo largo de la aventura, Hiro aprenderá a transformarse en distintos animales, cada uno con habilidades únicas. ¿Necesitas romper una pared? Conviértete en armadillo. ¿Hace falta alcanzar una cornisa inalcanzable? Pega un salto como una rana. ¿Tienes que volar por un barranco? Extiende tus alas como un ave.
Estas transformaciones no son simples “power-ups”, sino herramientas esenciales para avanzar en los niveles, resolver puzles y acceder a zonas ocultas. La jugabilidad se basa en saber cuándo y cómo usar cada forma, ofreciendo así una experiencia dinámica, fluida y en constante evolución.
Además, la combinación entre acción y puzles hace que Hirogami no sea ni un simple plataformas ni un juego contemplativo: es una fusión inteligente de ambos mundos, como un sushi perfecto entre el arroz y el wasabi.
Rompecabezas en 3D con sabor japonés
Los niveles están construidos como pequeñas obras de ingeniería de papel: puzles tridimensionales que te obligan a pensar en profundidad, explorar y experimentar. Aquí no hay caminos evidentes ni tutoriales que te lo mastiquen todo. El jugador tiene que observar, deducir y probar, todo ello con la tranquilidad de una banda sonora que invita más a la meditación que a la frustración.
Ese equilibrio entre reto y armonía es una de las claves de su atractivo. Incluso cuando fallas —y lo harás—, el juego no castiga con dureza, sino que te invita a intentarlo de nuevo, como si dijera: “tranquilo, doblas mal ahora, pero pronto serás un maestro del papel”.
Una banda sonora que acaricia el alma
El apartado sonoro de Hirogami merece mención aparte. Con una selección cuidada de instrumentos tradicionales japoneses, la música acompaña la experiencia con serenidad, emoción y carácter. Nada de trompetas épicas ni sintetizadores estridentes: aquí suenan flautas de bambú, tambores suaves y acordes que parecen sacados de un jardín zen.
La banda sonora no solo ambienta, también respira con el jugador. Cambia según el entorno, intensifica la tensión en los momentos clave y, sobre todo, transmite paz. Esa paz que tan a menudo se echa en falta en el mundo de los videojuegos.
Un lanzamiento que llega para quedarse (y no arrugarse)
Con su llegada prevista para el 3 de septiembre, Hirogami se perfila como uno de los títulos más originales del tramo final de 2025. No solo por su propuesta estética, sino por su apuesta jugable: una mezcla entre plataformas, aventura y puzle, aderezada con identidad propia.
Además, no se trata de una rareza de nicho. Su llegada a Steam y PlayStation 5 demuestra una ambición por llegar a un público amplio, que busca algo diferente pero pulido, bello pero desafiante. Y a falta de confirmación sobre una posible edición física (¡ojalá!), todo apunta a que Hirogami podría convertirse en ese título que entra por los ojos… y se queda en el corazón.