En un mercado saturado de RPGs que prometen salvar al mundo por enésima vez, Yasha: Legends of the Demon Blade no solo se atreve a entrar por la puerta grande, sino que lo hace a sablazo limpio, con estética japonesa, demonios de manual y un trío de protagonistas que parecen salidos de una colaboración entre Studio Ghibli y Quentin Tarantino.
Desarrollado por el estudio independiente taiwanés 7QUARK y publicado a nivel global por Game Source Entertainment, el juego ha llegado oficialmente a Steam, Nintendo Switch, PlayStation 4 y PlayStation 5, con una estrategia que mezcla descuentos agresivos, pegatinas de LINE y un cortometraje anime como carta de presentación. No sabemos si es marketing o magia negra, pero funciona.
Y por si fuera poco, el lanzamiento viene acompañado de un libro de arte digital, una banda sonora original y la promesa de contenido futuro. ¿Demasiado bueno para ser cierto? Puede ser. Pero aquí hemos venido a jugar… y a morir unas cuantas veces.
Demonios en la era Edo: espadas, arcos y mucho sudor
La historia nos lleva a un Japón alternativo en la era Edo, donde el legendario Zorro de Nueve Colas ha vuelto para vengarse de la humanidad. ¿Y cómo lo hace? Pues como todos los zorros demoníacos con carisma: reuniendo un ejército infernal y liándola parda.
Aquí es donde entramos nosotros, eligiendo entre tres héroes tan distintos como letales:
- Shigure, un ninja inmortal que no tiene claro si es protagonista o villano. Su voz la pone Yoko Hikasa, conocida por doblar a Mio Akiyama en K-On! y a Frieda Reiss en Attack on Titan.
- Sara, una emisaria Oni que reparte tortas con elegancia demoníaca. Doblada por Ayana Taketatsu, voz de Azusa Nakano en K-On! y Nino Nakano en The Quintessential Quintuplets.
- Taketora, un samurái que parece haber hecho un máster en venganza demoníaca. Su voz es la del todoterreno Rikiya Koyama, presente en Fate/Zero, Detective Conan y Naruto.
Cada uno maneja un estilo de combate único: espadas demoníacas, espadas dobles o un arco japonés que haría llorar de envidia a Legolas. La acción es intensa, con mecánicas roguelite que garantizan que morirás… mucho. Pero oye, morir en Japón feudal nunca fue tan bonito.
Bonus para fans: arte, música y descuentos que tientan
Además del juego base, Game Source Entertainment ha querido mimar a los fans con una edición de lujo cargada de extras. Hablamos de un libro de arte digital, donde se puede apreciar cada detalle de diseño y demonio con textura premium, y una banda sonora que mezcla tambores taiko, flautas shakuhachi y una dosis de épica suficiente para sentirte en un anime en cada combate.
Durante la primera semana, el juego tiene un 10% de descuento, y la edición deluxe baja hasta un 20%. No es exactamente regalarlo, pero es lo más cerca que vas a estar de sentir que haces una buena inversión en medio de la inflación gamer actual.

¿Y después del lanzamiento? Más armas, más enemigos, más dolor
El equipo de 7QUARK ya ha confirmado que esto es solo el comienzo. En la hoja de ruta inicial se incluyen seis nuevas armas, nuevos aspectos para los tres personajes principales y un prometedor modo Boss Rush que promete elevar el nivel de desafío… y de sudor en las palmas de las manos.
También se integrará una opción para repetir voces (ideal para fans del doblaje japonés) y se introducirán nuevos patrones de ataque para enemigos, lo que significa que incluso el demonio que creías tener controlado, ahora vendrá con trucos nuevos bajo la manga. Literalmente.
Ah, y por si aún no estabas lo suficientemente entretenido, han producido un cortometraje de anime oficial, en colaboración con Bandai Namco Pictures, que ya está disponible en YouTube. Sí, lo sabemos. También hemos ido a verlo antes de terminar este párrafo.
Pegatinas adorables y marketing con colmillos
Por último, pero no menos importante (y desde luego no más serio), Game Source Entertainment ha lanzado un set oficial de stickers de LINE con personajes del juego. Son adorables, son divertidos y probablemente harán que tu grupo de WhatsApp parezca un cruce entre un dojo japonés y una reunión de otakus exaltados.
Es una forma inteligente de extender la personalidad del juego más allá de las pantallas y colarse en tus conversaciones diarias. Y seamos sinceros, ¿quién no quiere mandar un sticker de un samurái cabreado cada vez que el jefe pide algo a última hora?

¿Es este el próximo gran RPG de culto?
Yasha: Legends of the Demon Blade no ha llegado con una superproducción detrás, pero sí con una propuesta clara, un estilo visual cuidado, y lo más importante: alma. En un panorama donde muchos juegos se parecen entre sí como clones de una IA sin imaginación, este título destaca por hacer bien lo básico y vestirlo con folklore, dificultad y mucho, mucho carisma.
¿Estamos ante el próximo juego de culto para fans del anime y los RPG exigentes? El tiempo lo dirá. Por ahora, nosotros nos vamos a echar otra partida. Y otra. Y otra. Porque si algo tiene este juego, es ese peligroso “una más y me voy” que acaba en “me he pasado la noche luchando contra un demonio-zorro con nueve colas y cero escrúpulos”.