El equipo de Mighty Eyes no ha viajado al pasado, pero casi. Tras un lanzamiento con más baches que una carretera del siglo XIX, el estudio neozelandés ha compartido los planes para revitalizar Wanderer: The Fragments of Fate a lo largo de 2025. Y lo hace con una hoja de ruta que no solo apunta a resolver problemas, sino también a expandir las posibilidades del juego y afianzar su promesa de ser una experiencia VR inolvidable.
La versión actual ya está disponible en Meta Quest y PlayStation VR2, y aunque la edición para SteamVR aún se hace de rogar, el estudio asegura que el futuro traerá sorpresas para todos los viajeros temporales, sin importar su plataforma.
Mejoras con efecto dominó: del combate a los avatares
Una de las grandes promesas para este año es la revisión del combate. Los jugadores habían expresado que las peleas se sentían toscas y poco satisfactorias. La respuesta de Mighty Eyes ha sido clara: reconstruir la física del combate, mejorar las reacciones de los enemigos y dotar de una sensación más natural a los enfrentamientos.
No todo es lucha en este viaje temporal. También se ha anunciado una personalización más rica para los avatares, que permitirá a los usuarios sentirse aún más representados en el juego. La inclusión de nuevas animaciones, expresiones y detalles de estilo son parte de esta actualización.
Un juego que evoluciona en todos los sentidos
La hoja de ruta también contempla mejoras técnicas que muchos agradecerán, especialmente quienes juegan en Quest 2 y Quest 3, donde los problemas de rendimiento y bugs han sido protagonistas no deseados. Se han lanzado ya varios hotfixes para abordar colisiones defectuosas, objetos invisibles y fallos en los niveles, pero el equipo promete que lo mejor está por venir.
En el horizonte también aparecen versiones optimizadas para PS5 Pro y compatibilidad más fluida con Quest 3, lo que apunta a un rendimiento más estable y una experiencia más inmersiva.

Más contenido, más profundidad: tres nuevos niveles y funciones jugables
Wanderer: The Fragments of Fate no solo mejora lo existente: también añade. La hoja de ruta prevé el lanzamiento de tres nuevos niveles a lo largo del año, todos con un diseño más abierto, escenarios interactivos y nuevas mecánicas. Algunas de estas novedades incluyen acciones como nadar, saltar, agacharse, escalar o deslizarse, lo que eleva notablemente la sensación de inmersión.
Y si te habías encariñado con Samuel, el simpático reloj compañero, prepárate para conocer su versión mejorada. Ahora incluirá una nueva interfaz, sistema de almacenamiento más intuitivo y una herramienta llamada Echo Diviner, que te ayudará a encontrar objetos perdidos o secretos en el entorno.
Una aventura que escucha a su comunidad
Pocas veces se ve a un estudio asumir de forma tan abierta sus errores iniciales y trabajar con la comunidad para solucionarlos. En su comunicación oficial, Mighty Eyes ha agradecido el apoyo de los jugadores y ha subrayado que su misión es entregar la mejor versión posible de su ambicioso viaje en el tiempo.
El objetivo es claro: convertir Wanderer: The Fragments of Fate en una joya de la realidad virtual, no solo por su narrativa y puzles, sino también por su pulido técnico y jugabilidad.

Mirando al futuro… sin dejar el pasado
Aunque aún no hay fecha concreta para el lanzamiento en SteamVR, el estudio ha confirmado que está en sus planes. Mientras tanto, quienes ya exploran los misterios del tiempo en Meta Quest y PSVR2 pueden esperar una evolución constante, con actualizaciones que buscarán hacer justicia a la promesa original del juego: una épica aventura donde cada decisión resuena a través del tiempo.