Llega el 13 de noviembre con más de un millón de canciones, modos de juego renovados y una mezcla entre bienestar y diversión que promete hacer historia en la VR
Pocas veces la realidad virtual y la música se han entendido tan bien como en Realize Music: Sing, el nuevo título de Realize Music, Inc., que aterrizará el 13 de noviembre en la tienda Meta Quest. La compañía, cofundada por Mike Wilson (sí, el mismo genio que ayudó a dar vida a Devolver Digital), promete un renacimiento del karaoke… pero en clave cósmica. Esta no es una app para ver quién desafina menos, sino una experiencia inmersiva que transforma tu voz en color, luz y movimiento, con mundos reactivos y un catálogo que haría llorar a Spotify: más de un millón de canciones licenciadas, con nuevas cada semana.
Lo que empezó como una app de bienestar en acceso temprano ahora se presenta como un juego completo, con un modelo flexible que permite probar canciones gratis, comprar pistas sueltas o suscribirse para acceder a todo el catálogo. Un movimiento inteligente: la diversión no debería tener muros de pago, y aquí puedes cantar a pleno pulmón sin sentirte juzgado (ni por los vecinos… al menos, no oficialmente).
Cantar nunca fue tan inmersivo: luces, mundos y bienestar mental
Realize Music: Sing ofrece doce mundos de realidad virtual donde cada nota que entonas transforma el entorno. Subes una octava y el cielo estalla en luz; susurras un verso y la escena se calma en una coreografía visual de colores y partículas. Todo fluye con la sincronización palabra por palabra de las letras, efectos visuales que reaccionan al tono y modos de juego que se adaptan a cada tipo de cantante: Song Hero, con puntuaciones y rankings para los competitivos, y Singadelic, pensado para los que solo quieren dejarse llevar y liberar endorfinas.
El título no solo busca entretener: quiere que te sientas bien. Y no lo dice por decir. Estudios científicos respaldan que cantar estimula el nervio vago, reduce el estrés y mejora la respiración. En otras palabras, Realize Music: Sing podría ser la terapia más divertida del año. “Rediseñamos Sing para que fuera, ante todo, un juego —con el bienestar como un beneficio adicional”, explica Mike Wilson. Y vaya si lo han conseguido.
Juega como quieras: de pie, sentado o tumbado (sí, también vale el sofá)
El juego está pensado para ser tan accesible como su catálogo. Puedes usar los mandos para tocar tambores virtuales, pintar trazos de luz, buscar canciones con la voz o incluso jugar completamente recostado. Si lo tuyo es cantar solo, es una experiencia íntima; si prefieres compartirlo, basta con transmitirlo a la televisión para montar un concierto casero con tus amigos. En Realize Music: Sing, el salón se convierte en escenario y tu voz en el instrumento principal.
El diseño sin prejuicios es una de las claves del proyecto: aquí nadie te juzga por cómo cantas. La idea es disfrutar, no competir (aunque si te pica el gusanillo, el modo competitivo está ahí esperándote).
Un catálogo que rompe récords (y oídos desafinados)
La gran estrella del lanzamiento es su gigantesco catálogo: más de un millón de canciones con licencia oficial. Pop, rock, clásicos, indie, R&B, country, K-pop… lo que quieras cantar, está ahí. Puedes probar temas gratis, comprar tus favoritos o suscribirte por 9,99 dólares al mes durante los tres primeros meses (luego 14,99 o 119,99 al año). Todo un buffet musical con actualizaciones semanales.
El equipo de Realize Music, compuesto por veteranos de Sony, Rockstar y Guitar Hero, asegura que esta es solo la primera fase. En los próximos meses se ampliarán regiones y plataformas, y también se lanzará una app móvil complementaria para explorar canciones, descubrir tu rango vocal o crear listas de reproducción sin visor.
Un juego nacido de su comunidad
El relanzamiento de Sing no es casualidad: se ha rediseñado en base al feedback de los usuarios del acceso anticipado. Ahora incluye un sistema de progresión con experiencia, logros, interfaz mejorada, búsqueda avanzada y un sistema de descubrimiento musical que pone los éxitos más populares al alcance de la voz. “Los cambios surgieron directamente de las peticiones de los jugadores”, comenta Mark Roemer, CEO de la compañía. “Queríamos que todo el mundo pudiera probar el juego gratis, cantar lo que le apetezca y disfrutar sin barreras”.
Y es que cantar, en el fondo, no va de notas perfectas. Va de dejarse llevar, de liberar tensión, de celebrar que seguimos vivos a base de gritos afinados o no tanto. Realize Music: Sing toma esa idea y la lleva a la VR, donde la voz se convierte en luz, los temazos en mundos inmersivos y el karaoke en pura magia digital.
