Ritmo, fuego y guitarras poseídas: el nuevo título de Rogueside Games convierte cada riff en un ataque y cada solo en una explosión de adrenalina
El estudio belga Rogueside Games ha decidido que el infierno no sea un lugar de tortura, sino de pura música y destrucción. Desde hoy, Devil Jam ya está disponible para PC a través de Steam, y lo hace con un descuento del 10 % durante sus dos primeras semanas. Este trepidante juego de acción dibujado a mano mezcla ritmo, metal y locura visual en una experiencia donde los instrumentos musicales están literalmente poseídos. En este averno rítmico, cada nota es un golpe, cada riff una bala, y cada breakdown un terremoto de fuego.
El concepto es tan delirante como brillante: los músicos firman un pacto con el diablo para alcanzar la gloria eterna y terminan ofreciendo el concierto más explosivo de sus vidas… desde las entrañas del infierno. El jugador controla a estos artistas condenados, armados con instrumentos que atacan al ritmo de la música y transforman cada partida en una sesión improvisada de caos y destrucción. Aquí no hay pausas, ni coros, ni descanso: solo metal, metralla y monstruos.
Rogueside convierte la música en arma de destrucción infernal
“Queríamos crear un juego con la energía de un buen tema de metal: una introducción potente, ritmo frenético, solos sin parar y un final que clama por un bis”, explica Baue Olbrechts, diseñador jefe de Rogueside Games. Esa filosofía se nota desde el primer segundo. El combate fluye con una precisión musical digna de un baterista con seis brazos, y los escenarios —dibujados a mano con un nivel de detalle enfermizo— parecen salidos de una portada de Iron Maiden después de un mal viaje.
El ritmo lo es todo: la sincronización marca la diferencia entre la gloria y la condena. Cuanto mejor te adaptas al tempo del metal infernal, más devastadores son tus ataques y más espectacular el caos visual que desatas a tu alrededor. Y cuando un grupo de demonios cae bajo el rugido de tu guitarra eléctrica, la sensación es tan catártica como un buen solo de 10 minutos.
Acción brutal, combinaciones infinitas y jefes que no dan tregua
Más allá del espectáculo audiovisual, Devil Jam esconde una jugabilidad profunda. El inventario permite más de 4,9 cuatrillones de combinaciones posibles, lo que garantiza que cada músico demoníaco pueda crear su propia sinfonía de destrucción. Desde guitarras que lanzan fuego hasta tambores que invocan rayos, las posibilidades son absurdamente extensas, y las sinergias entre armas convierten cada enfrentamiento en un auténtico festival de combos.
Los jefes infernales son un capítulo aparte: cada uno exige reflejos, estrategia y, por supuesto, sentido del ritmo. No vale disparar a lo loco; hay que seguir el compás si no quieres acabar tocando la marcha fúnebre… de ti mismo. Y todo ello envuelto en una estética que combina el trazo artesanal con un diseño digno de cómic satánico: puro espectáculo a golpe de batería.
Lo que viene: consolas, caos y metal sin fin
Por ahora, Devil Jam está disponible únicamente para PC con Windows, pero las versiones para PlayStation 5, Nintendo Switch y Xbox Series X|S ya están en camino. Es solo cuestión de tiempo que los demonios se suban a los escenarios de consola.
Rogueside Games, conocidos por su amor al detalle y su estilo visual inconfundible, firma aquí una carta de amor al metal, a los videojuegos de acción y al arte dibujado a mano. Cada pixel rezuma personalidad, cada enemigo parece haber sido diseñado con una sonrisa maliciosa, y cada partida te deja la sensación de haber sobrevivido a un concierto en el mismísimo Hades.
