KAKU: Ancient Seal aterriza en PlayStation 5 dispuesto a demostrar que en China también saben construir mundos abiertos con ambición, sentido del humor y una estética que mezcla mitología y animación moderna. Detrás del proyecto está BINGOBELL, un estudio que, sin grandes alardes mediáticos, ha conseguido una obra que respira aventura por los cuatro costados. La edición física, distribuida en España por Meridiem Games, es una pequeña joya para los amantes del formato coleccionista: cuidada, completa y con ese toque de mimo que siempre ponen en sus lanzamientos.
Una historia de dioses elementales, máscaras tribales y un cerdo que vuela
El punto de partida no podría ser más clásico: los dioses elementales han perdido el equilibrio y el joven Kaku, armado con su bastón y acompañado de su inseparable cerdito volador, debe restaurar la armonía del mundo. Suena a tópico, pero lo que hace especial a esta aventura es la forma en que combina exploración, combates y puzles sin perder ritmo ni frescura. Cada bioma —fuego, hielo, viento y tierra— ofrece su propia personalidad, con enemigos y mecánicas que obligan a adaptarse constantemente. La narrativa no busca profundidad filosófica, pero mantiene el interés gracias a su tono aventurero y un mundo lleno de secretos.

Un mundo abierto vibrante que sorprende por su escala y su corazón
El mapa de KAKU: Ancient Seal es amplio, colorido y sorprendentemente vivo para tratarse de un título AA. Las criaturas que habitan en él, los efectos de luz y el constante cambio climático logran una sensación de inmersión que recuerda a grandes referentes del género, aunque sin caer en el intento de imitarlos. La exploración es uno de sus mayores aciertos: cada rincón invita a desviarse del camino principal, descubrir templos ocultos o coleccionar artefactos que amplían las habilidades del protagonista. Es cierto que a veces la cámara se rebela o el rendimiento sufre caídas en zonas muy cargadas, pero el conjunto mantiene el tipo con dignidad.

Combate y progresión: entre la acción directa y la estrategia elemental
El sistema de combate combina ataques cuerpo a cuerpo con habilidades basadas en los elementos. No es tan refinado como en otros títulos del género, pero ofrece suficiente variedad para mantener el interés. A medida que avanzamos, desbloqueamos mejoras, combos y poderes que cambian completamente la forma de afrontar a los enemigos. Los jefes finales son espectaculares y exigen algo más que machacar botones, aunque también dejan ver las costuras del control, algo impreciso en momentos críticos. Aun así, las sensaciones generales son positivas: el combate es ágil, divertido y visualmente potente.

Apartado visual y técnico: color, diseño y una dirección artística notable
Visualmente, KAKU: Ancient Seal brilla gracias a su estilo artístico, más que por su músculo técnico. Los escenarios están llenos de detalles y la paleta de colores cambia con cada región, transmitiendo esa sensación de viaje constante. En PS5, el juego luce estable a 60 fps la mayor parte del tiempo, con tiempos de carga casi instantáneos y una nitidez que le sienta de maravilla. La banda sonora acompaña con temas orquestales que realzan la épica sin volverse repetitivos, y los efectos de sonido ayudan a dar vida a ese universo de espíritus, ruinas y bestias elementales.

Una edición física que demuestra el valor del formato
La edición física distribuida por Meridiem Games merece mención aparte. En un mercado donde lo digital se impone a toda velocidad, encontrar una copia cuidada, con arte impreso y materiales de calidad, es casi un acto de resistencia cultural. Meridiem vuelve a demostrar por qué es una de las grandes responsables de que títulos así lleguen a las estanterías españolas. Es una edición que no solo se disfruta en consola, sino también en la colección.

Conclusión GXR
KAKU: Ancient Seal tiene carencias técnicas y ciertos desajustes en el control, pero compensa con una dirección artística magnífica, una ambientación fascinante y una exploración que recompensa la curiosidad. En PS5, se siente fluido, estable y visualmente más pulido que en su versión original de PC. Y con el añadido de su edición física gracias a Meridiem Games, se convierte en una compra recomendable para quienes buscan una aventura clásica con alma moderna.
Puntuación GXR: 8/10
Pros:
- Mundo abierto lleno de vida y variedad.
- Dirección artística y diseño de niveles inspirados.
- Exploración adictiva con sensación de descubrimiento.
- Edición física impecable por parte de Meridiem Games.
Contras:
- Control algo impreciso en combate.
- Caídas de rendimiento puntuales en áreas grandes.
- Narrativa simple y predecible.
- Animaciones algo toscas en algunos personajes secundarios.
